Adriana Cuéllar sabe que debe agradecerle a Dios por su familia, pero también reconoce que debe conservar y preservar los recursos naturales mientras celebra la semana más importante de la fe católica.
Es por eso que este Domingo de Ramos asistió junto a su familia a la eucaristía en la Catedral La Inmaculada Concepción de Neiva y reemplazó el tradicional ramo de Palma de Cera, hábitat del Loro Orejiamarillo, por una de las Palmas Areca que entregó la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena – CAM en articulación con la Policía Ambiental y el Ejército Nacional.
“Desafortunadamente con las palmas tradicionales estamos acabando con unas especies muy importante para la humanidad, pero ahora con estas plantas que estamos recibiendo, las cuales vamos a mantener en nuestras casas, estamos ayudando a proteger la naturaleza”, explicó la feligrés.
La campaña llevada a cabo por la Autoridad Ambiental del Huila, consistió en entregar plantas para reemplazar las tradiciones que afectan la flora y fauna silvestre y reconciliar al ser humano con la naturaleza.
“Con estas plantas queremos que todos los huilenses se apropien cada año y siembren la Palma Areca como un símbolo de amor y de vida”, aseguró Maribel Lozano, funcionaria de Educación Ambiental de la CAM.

Más 16 mil palmas
Lozano señaló que desde la CAM se hizo entrega de más de 16 mil palmas en todo el Huila con el fin de celebrar una Semana Santa en Paz con la naturaleza.

Por su parte, Monseñor Froilán Casas, obispo de la Diócesis de Neiva, explicó que con esta entrega de material forestal, el mensaje a los católicos es contribuir a conservar el patrimonio natural.
 “Agradecemos a la CAM por el apoyo a la hora de sensibilizar a la gente en el cuidado del medioambiente y nuestro llamado es que el Domingo de Ramos sea una tradición enmarcada en el respeto y el cuidado del medioambiente ”, aseguró.

Ramos por plantas
Sobre el cambio de los tradicionales ramos de Palma de Cera por palmas vivas que luego de la eucaristía son sembrados en cada uno de los hogares, no solamente los feligreses se han sensibilizado, sino también la misma comunidad que aprovechando la fecha salieron a vender plantas naturales ornamentales.
“Mi mayor motivación, desde hace varios años atrás, es ofrecerle a la gente plantas y no ramos de palmas, porque es mejor tener una planta en casa, sembrada en matera, bendecida y viva; y reemplazar el tradicional ramo que le hace daño a la naturaleza”, finalizó diciendo Sandra Díaz comerciante de la capital huilense.