En el Día Internacional para la Protección de los Osos, la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena – CAM rindió homenaje al Oso de Anteojos, especie que se ha reportado en 14 de los 37 municipios que tiene el departamento del Huila.
 
El primer registro de un proceso de apareamiento de osos en su hábitat natural, las imágenes en cámara de osas lactando a sus crías, dinámicas reproductivas activas de esta especie y el registro de cinco camadas de osos con efectividad de sobrevivencia del 100%, hacen del Huila un territorio de osos.
 
“Esto nos demuestra que en el Huila contamos con hábitats propicios para el crecimiento de poblaciones de uno de los mamíferos más grandes que hay en Los Andes y una de las especies más amenazadas que existen actualmente. Esta labor de conservación se está realizando de manera articulada entre la comunidad e instituciones”, explicó Katherine Arenas, bióloga de la CAM.
 
Grupos de monitoreo
La profesional de la autoridad ambiental del territorio huilense indicó que el oso de anteojos es la especie sombrilla que une a los huilenses en torno a su conservación.
 
“Hemos logrado a través de este proceso la consolidación de 23 grupos de monitoreo comunitario conformados por 374 integrantes que cohabitan con especies tan importantes como el oso de anteojos y que nos ha permitido también conservar otras especies que viven en estos bosques”, señaló Arenas.  
 
Proteger al oso
Así mismo, apreciar y proteger al oso de anteojos es el llamado que hizo la entidad ambiental en las diferentes actividades que se desarrollaron en instituciones educativas, comunidades y entidades para conmemorar esta fecha ambiental.
 
En el sur del Huila con los estudiantes y docentes de la Institución Educativa San José del municipio de Oporapa durante el Día para la Protección de los Osos, a través de una capacitación, la CAM dio a conocer la importancia ecológica de los osos y en especial del oso de anteojos, así como la importancia de mantener los parques naturales regionales El Dorado y Serranía de Minas como ecosistemas estratégicos para esta especie.
 
Igualmente, la entidad ambiental destacó el trabajo y el esfuerzo que realizan los grupos de monitoreo comunitario en las áreas protegidas del departamento, labor que ha permitido conocer las poblaciones de oso andino que habitan el territorio.
 
“Todo ha surgido de la educación ambiental de contar con campesinos y comunidades que en su territorio deciden proteger la naturaleza y el oso de anteojos como una de las especies focales”, aseguró la bióloga quien aclaró que este proceso ha generado estrategias que se han ampliado, las cuales nacieron en el sur del departamento del Huila pero que han logrado llegar hasta el norte del territorio.
 
“En el sur del departamento empezamos y con fuertes procesos de conservación pasamos a la zona centro y occidente, donde también hemos reportado la especie, hasta llegar al norte donde, como en todo el Huila, se han desarrollado acciones que han enseñado desde los niños a los más adultos a conservar al oso de anteojos”, finalizó diciendo Katherine Arenas.